
Terminadas las eliminatorias, ningún periodista deportivo limeño se ha preocupado de realizar un análisis de los resultados alcanzados por la selección nacional, ni de sus causas, ni de los responsables; ni han propuesto las medidas para que la tragedia no se repita en las próximas eliminatorias. Antes bien, se trata de distraer a los aficionados, orientando su atención hacia hechos baladíes.
¿Qué hacer para cambiar las cosas ? Ante todo, solicitar la desafiliaciòn voluntaria de la FIFA - y si ella se resiste, provocarla- con el fin de reestructurar el fútbol peruano desde sus raíces, modernizando y democratizando sus estatutos. Luego, expulsar a los dirigentes corruptos e ineptos, reorganizar los equipos convirtiéndolos en sociedades anónimas, reglamentar la situación de los jugadores, eliminar el continuismo de los dirigentes y declarar el Servicio Deportivo Obligatorio, por el que todo jugador de cualquier deporte deberá ponerse a disposición de la selección nacional, si es llamado y cumplir con estrictas normas de disciplina. Además, todo jugador profesional deberá acreditar estudios universitarios o superiores. Por supuesto que estos planteamientos jamás serán aceptados por dirigentes, jugadores díscolos y metalizados, y, lo que e

s peor,por los periodistas deportivos, canales de TV y periódicos que solo buscan traficar con el fútbol, desinformando a los aficionados, tratando todo el tiempo de hacerles creer que el Perú "matemáticamente aún puede clasificarse". Es por eso que ahora nadie pide cuentas a nadie.Esta reestructuración debió haber empezado apenas ocurrió la eliminación - hace ya varios meses-, con la destitución del Comité Sudáfrica 2010 y del entrenador y la culminación de las eliminatorias con un equipo nuevo, joven, con miras al mundial 2014. Se prefirió seguir jugando coni los mismos perdedores y los Solano y Chorri continuaron quitando oportunidades a los nuevos valores. Ya se ha perdido tiempo, pero todavía se puede iniciar el cambio del sistema si no queremos vivir la misma frustración en el 2013.
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