Otro hecho verídico que demuestra la innata vocaciòn de ladrón que tuvo García desde joven, y su pasmoso desparpajo para proclamarlo a los cuatro vientos, es el siguiente episodio que contó el anciano senador por Huánuco, Quintana Gurt, quien incluso fue Ministro de Agricultura en el primer gobierno de García.
Eran los últimos días de ese periodo aciago, en junio de 1990, y los jerarcas apristas celebraban con whiskey no sé qué acontecimiento. En un momento dado, el presidente García se acerca a Quintana Gurt, uno de los pocos apristas honrados de ese gobierno, y le dice a voz en cuello. "Oye, viejo. Tú eres el único huevón que no ha aprovechado en este gobierno. Ahora jódete porque ya se acaba todo". Es decir, según García, los políticos honrados y honestos son huevones o cojudos.
Eran los últimos días de ese periodo aciago, en junio de 1990, y los jerarcas apristas celebraban con whiskey no sé qué acontecimiento. En un momento dado, el presidente García se acerca a Quintana Gurt, uno de los pocos apristas honrados de ese gobierno, y le dice a voz en cuello. "Oye, viejo. Tú eres el único huevón que no ha aprovechado en este gobierno. Ahora jódete porque ya se acaba todo". Es decir, según García, los políticos honrados y honestos son huevones o cojudos.
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