UN JUEGO DE NIÑOS

Estos dos cancilleres, Belaúnde y Vidal, insultan la inteligencia de chilenos y peruanos. Según ellos, los militares peruanos suspenden obedientemente unos ejercicios militares en la frontera sur, a pedido de los chilenos "para no levantar suspicacias, ni herir susceptibilidades". Luego esos mismos chilenos preparan unas maniobras cerca al Perú, con nombres y libreto claramente alusivos al Perú. El canciller peruano y el ministro de defensa piden " a título personal" que dichos ejercicios se suspendan "para evitar suspicacias y no herir susceptibilidades" de los peruanos.Los chilenos dicen que ellos no hacen caso de las peticiones peruanas, pero terminan cambiando el escenario y el libreto de esos ejercicios, pero, a la vez, declaran que "el Perú no ha influido para estos cambios". Para culminar con esta comedia, el canciller mapochino asegura que estos ejercicios son "en función de una operación de paz".