domingo, 7 de febrero de 2010

ENCUESSTA REVELA QUE EL 58% RESPALDA A CHAVEZ


Más del 58% de la población respalda al presidente Hugo Chávez, de acuerdo a una encuesta elaborada por el Instituto Venezolano de Análisis de Datos. Y si se realizaran elecciones próximamente la mayoría lo reelegiría. El informe señala que el 58,3% considera que el presidente lo ha hecho bien, mientras que un 38,9% piensa lo contrario. De otro lado, el 42,4% lo reelegiría, frente al 41,5% que se opone.

viernes, 5 de febrero de 2010

UNIDAD, PERO CON NUEVOS LIDERES DE IZQUIERDA


En tiempos de Velasco, los universitarios se enfrentaban, con cadenas y cachiporras, entre los que caracterizaban al gobierno como fascista, fascistizante y fascistoide. Estos grupos, diferenciados por solamente unas letras, eran, sin embargo, enemigos acérrimnos que se golpeaban diariamente, en lugar de defender a un gobierno de clara tendencia izquierdista y arrinconar al Apra y los partidos de derecha. Esos muchachos solamente seguían los dictados de sus líderes, dominados por el sectarismo, el caudillismo, el dogmatismo, el hegemonismo y el infantilismo, errores que no les permitieron construir una real Izquierda Unida. Así traicionaron las heroicas luchas del pueblo peruano por la democracia y entregaron el poder en una bandeja a la derecha. Ellos deben admitir sus errores y retirarse de la política, como parece que lo hará Alberto Moreno. Ese mismo camino debe seguir Carlos Tapia, quien, al haberse burlado del Padre Arana solo por decir que se "abstendrìa" de votar por Ollanta, ha abierto una brecha entre el PNP y Arana, cuando lo que se debe buscar es un acercamiento entre estos dos líderes, para confrontar programas, planes de gobierno y estrategias para derrotar a la derecha en primera vuelta. Porque, si las fuerzas unidas del nacionalismo, la izquierda y los progresistas no ganan en primera vuelta, la batalla por el poder estará perdida. Por desgracia, Tapia sigue creyendo, como en los 80 creía que Vanguardia Revolucionaria podría llegar sola a la presidencia, que Ollanta puede alcanzar el poder con solo sus propias fuerzas. ¿Para qué sirve la historia, si no aprendemos lecciones de ella ?
- 02/05/2010 - 08:32

5 DE FEBRERO DE 1975

¿Ironías del destino o transfuguismo de todo un partido polìtico ? En 1975, un dìa como hoy, el Apra, en contubernio con la CIA y la derecha cavernaria del Perú, aprovechó una huelga de los policías para organizar una revuelta delincuencial y matonesca en Lima. Los policías se encerraron en el Cuartel de Radio Patrulla y las turbas de malhechores, contratados y dirigidos por conocidos apristas, atacaron e incendiaron el Círculo Militar en la Plaza San Martìn, el Centro Cívico, el diario Correo y otros locales. Pretendieron destruir también el diario EXpreso, en manos de sus trabajadores, pero estos los rechazaron valientemente, obligándolos a huir. Luego se dedicaron a saquear las grandes tiendas comerciales, destruyendo e incendiando todo a su paso.
Estas acciones estaban debidamente organizadas y coordinadas. Las fotos tomadas por los reporteros, demostraron, al dìa siguiente, que los incitadores y dirigentes eran miembros conspicuos del Apra. Para defender la Revolución, Velasco pensó, en un primer momento, declarar fuera de la ley al partido- por enésima vez en su turbia historia-, pero por presiones de los gobiernos de Estados Unidos y Venezuela, donde gobernaba el corrupto y ladrón, Carlos Andrés Pérez, compadre y gemelo de García, simplemente ordenó una investigación.

Así manipulò y se aprovechò de las nacesidades de la Policía este partido camaleónico. Y hoy se enfrentan a esa misma Policía, negándose a mejorar su situación y amenazándolos con medidas drásticas en caso de que inicien una huelga.Es decir, cuando conviene al Apra, la huelga de policìas se justifica, aunque sea una protesta con suma violencia; pero hoy, que el Apra está en el gobierno, el policìa que entra en paralizaciòn es antipatriota, traidor y se le amenaza con sanciones draconianas. Los violentistas de ayer, se han convertido en unos angelitos pacificadores. ¿Dónde quedan los principios ?
- 02/05/2010 - 07:57

NO EXISTE LIBERTAD DE PRENSA

Los llamados medios de comunicación masiva constituyen hoy el arma principal del sistema contra las luchas sociales y los gobiernos populares y progresistas.

Sus loas a la “libertad de prensa” son de dientes para fuera puesto que en lugar de la información veraz y diversa favorecen la noticia y el pensamiento troquelados(los intereses de los DUENOS). Artífices de la esclavitud y la enajenación de las conciencias, sus contenidos son banales, sesgados, eurocéntricos, racistas, culturalmente empobrecedores y distorsionadores de la realidad.

Más NEOLIBERALI$MO es su receta para remediar la crisis del capitalismo.
Excelsos demócratas, han sido actores protagónicos de la desestabilización contra los gobierno de Hugo Chávez y Evo Morales.

Los medios de desinformación masiva(MDM), nombre que se han ganado a pulso, son los arietes principales del sistema dominante en la inducción del terror con el fin de desmovilizar la lucha popular y promover la represión del pensamiento crítico y de la protesta social.

No es casual su feroz animadversión hacia los gobiernos de Cuba, Venezuela, Ecuador y Bolivia, e incluso los más moderados de Argentina, Nicaragua, Honduras, Paraguay y Guatemala. En fin de cuentas estos han contribuido a crear en América Latina y el Caribe, junto a los de Brasil, Uruguay, los del CARICOM y en alguna medida Chile, un panorama político mucho más favorable a la independencia, la unidad e integración regional y las luchas populares.

La ALBA y UNASUR son sus frutos y ni los gobiernos de derecha han podido separarse del todo de esta corriente regional.
Si el ejemplo de Cuba en solitario alarmaba tanto a los paladines de la “democracia y el libre mercado”, la aparición de un equipo de líderes latinocaribeños que no se subordina incondicionalmente a Estados Unidos se ha vuelto intolerable para ellos. No ha de extrañar el proyecto que desarrollan para desarticularlo por distintas vías, cuyo componente fundamental son los MDM.
La batalla por los auténticos cambios democráticos y sociales se decide, en última instancia, en el terreno de las ideas, y los MDM participan en ella como escuadras de choque de la derecha, mientras los medios alternativos no han adquirido el desarrollo necesario para contrarrestarlos.

La cultura dominante parte con ventaja en esta batalla pues el sentido común de gran parte de las sociedades está moldeado por instituciones que, o son dominio exclusivo de las clases opresoras, o están a su servicio, o reciben gran influencia de sus ideas: el Estado, el sistema educacional, la jerarquía eclesiástica, las clases medias, las tradiciones conservadoras, los aparatos represivos, la inmensa mayoría de los partidos políticos y, por supuesto, los MDM son, como regla, reproductores de aquel sentido común, aunque como se ha demostrado, esto puede sufrir cambios dramáticos como consecuencia de las luchas populares y de los cambios sociales.
La alta peligrosidad de los MDM radica en que en las últimas décadas su influencia se ha vuelto omnipresente en la cotidianidad debido a la flexibilidad de las nuevas tecnologías y a la concentración de la propiedad sobre ellos por seis grupos internacionales, predominantemente estadunidenses, y apenas tres regionales en Latinoamérica, siempre ligados a oligopolios transnacionales de otras ramas.

Para esta minúscula ELITE la libertad de prensa equivale a la impune dictadura que ejerce sobre los contenidos de los MDM.
Los presidentes Rafael Correa, Hugo Chávez y Evo Morales han coincidido en catalogar a los MDM como instrumentos de desinformación y desestabilización. Correa ha afirmado que en cuanto asuma la presidencia de UNASUR en julio abogará por legislaciones nacionales que protejan a los CIUDADANOS y a los gobiernos contra esas prácticas. Es una iniciativa valiente, que para prosperar necesita el acompañamiento de las fuerzas populares en una intensa batalla de ideas.

Ante todo es crucialmente importante demoler el mito de la inexistente libertad de prensa, que sólo podrá alcanzarse cuando la PROPIEDAD de los MDM se democratice y los pueblos conquisten el derecho de decidir y supervisar sus CONTENIDOS. Es a partir de esa premisa que se iniciará el transito de la etapa de los MDM a la de los Medios de Difusión Democráticos(MDD).
- Jose Carlos - 02/05/2010 - 10:36

BAYLY ES SIMPLEMENTE LA VIEJA REACCION CON NUEVA CARA

NO sorprende que Bayly sea preferido por los jóvenes de las clases pudientes. El periodista de poses inoconclastas y anticlerical resume toda la "rebeldía" hasta donde pueden llegar estos muchachos hijos de papá; osea, reniegan de una sociedad pacata y huachafa, pero no de su sistema económico que les da los privilegios que tienen.
Los votos que apoyarían a Bayly representan el pensamiento indignado de tanta "porquería" que invade Lima: los cholos que orinan en la calle, los ambulantes que ensucian todo, los "marrones" que pretenden invadir playa Asia, la gente de cerros y los conos que malogran Lima, los violentistas que reclaman todo, los malditos comunistas, en resumen, los que hacen del Perú señorial, según ellos, un desastre.
Pero de los problemas de fondo, los defectos del sistema, nada. Porque eso es la esencia de Bayly, un conservador disfrazado de "revolucionario" que se asusta cuando le mencionan cambios verdaderos, entonces prefiere "votar con las narices tapadas" como lo hizo el 2006, conservar el sistema sacrificando las arcas del país, apoyar la corrupción antes que permitir que los serranos tomen el poder.
Ese es el meollo del asunto. Por eso es risible pensar que los jóvenes pudientes apoyen a Bayly porque representa una irreverente indignación contra la clase política. No, señores, lo hacen porque representa simplemente su forma de pensar: hacer lo que me de la gana, pero sin tocar mis privilegios, sin permitir que la chusma nos gobierne o que un gobierno humalista convierta a Asia y otras exclusivas playas donde juergean, en terreno de cholos atrevidos, igualito como piensa Aldo Mariátegui, quien no le perdona a Velasco el haber permitido que los serranos invadieran Miraflores.
Esa es la realidad, lo demás son idioteces.
- Prensa Bruta - 02/05/2010 - 08:43

jueves, 4 de febrero de 2010

OLLANTA: Y NO PODRÁN MATARLO

Por Sinesio López Jiménez

En las elecciones del 2006 varios candidatos (entre ellos García) cuestionaban el modelo neoliberal extremo. En el 2011 sólo Ollanta Humala sigue cuestionándolo. ¿Qué pasó? ¿Fueron derrotados? ¿Traicionaron? ¿Fueron cooptados? ¿Los convenció “la calidad” del modelo? Mi hipótesis es que pasó un poco de todo. Las izquierdas dispersas fueron aplastadas, García traicionó y el desempeño económico (más por el contexto internacional que por la calidad del modelo mismo) ha sido notable entre el 2006 y 2008. Vino luego la crisis y mostró sus límites. El candidato que asustó entonces a la derecha política y a los poderes fácticos fue Ollanta Humala. Se le satanizó, se le emparentó con Chávez, se le mostró como un Hitler peruano. Crearon un cuco a la medida de sus miedos y de sus intereses para combatirlo. Ollanta no tuvo, al parecer, el interés ni los medios para revertir la ofensiva derechista. Más aún: a veces reforzó con sus errores la pésima imagen creada por la derecha.

Ollanta sigue hoy asustando a la derecha y a los poderes fácticos. Durante todo su segundo gobierno, García ha encabezado una persistente ofensiva contra Ollanta para destruirlo políticamente. Ha fracasado. Ollanta sigue en pie y constituye una alternativa a todas las fuerzas de la derecha en la solución de los problemas de fondo que agobian el país: exclusión social y cultural; modelo neoliberal extremo; Estado ineficaz, excluyente, poco creíble y nada transparente y baja calidad de la democracia. ¿Cuál es el activo de Ollanta? Mi hipótesis es que tiene tres activos fundamentales: la férrea voluntad de cambiar el Perú por los caminos democráticos, la alta capacidad de resistencia frente a la ofensiva derechista y la representación política de los que se sienten excluidos (la ira, la protesta, el nacionalismo y el voto de los descontentos).

Desde luego, Ollanta, como casi todos los candidatos, presenta algunos déficits: no tiene un partido organizado, carece de un programa preciso o, si lo tiene, no lo ha difundido suficientemente y le falta construir una vasta coalición social y política de respaldo que dé viabilidad a sus propuestas de gobierno. Para formar esa coalición y destruir el cuco creado por derecha, Ollanta necesita precisar el alcance y los límites del cambio del modelo neoliberal. Tiene que señalar enfáticamente, por ejemplo, que dicho cambio no supone eliminar la economía de mercado para reemplazarla por el Estado ni acabar con los equilibrios macroeconómicos. Entre el neoliberalismo extremo y el estatismo caben otros modelos económicos más equilibrados. Cada modelo económico requiere una correlación de fuerzas que lo sustente. Chile pudo reformar el modelo pinochetista gracias a la coalición de centroizquierda y Uruguay ha podido resistir el extremismo neoliberal gracias a los partidos de izquierda y al apoyo de la sociedad civil.

No bastan, pues, el voto y la fuerza de los excluidos ni la voluntad de un caudillo para cambiar al Perú. Es necesario organizar una gran coalición del cambio. La derecha y los poderes fácticos se solazan con las encuestas de Lima que empequeñecen a Ollanta, se preocupan con los sondeos del Perú urbano que lo muestran creciendo o manteniendo su fuerza y se asustan con el Perú rural y semirrural al que no encuestan (un poco más de un tercio del país). El movimiento, la protesta, el cambio vienen, sin embargo, de la provincia. Lima siempre llega última (cuando llega). Eso dice la historia desde la independencia hasta nuestros días, pese a los importantes cambios de las últimas seis décadas. San Martín esperó vanamente en Pisco que Lima proclamara la independencia. Las desbordantes protestas de los 70 y los 80 nacieron en la provincia, avanzaron por diversas ciudades del país y culminaron en Lima privilegiada y conservadora. Esa ha sido, hasta ahora, la forma de movimiento de la historia peruana.

POR QUE GANA PREMIOS "LA TETA ASUSTADA"

Por: Mirko Lauer

La teta asustada es, por derecho propio, un lugar de la memoria. Al menos produce la misma perplejidad, furia incluso, entre las derechas racistas del Perú. En esos sectores los reconocimientos internacionales a la cinta son enfrentados con un silencio sepulcral, o aceptados a regañadientes. No les gusta el tema, no les gusta el tratamiento que se le da.

La película trae un mensaje de sanación (los efectos traumáticos de la violencia más infame pueden ser superados), e invita a pensar la tragedia peruana de los años 80-90 no como una abstracción, sino caso por caso. Los criminales mismos no aparecen en esta historia, solo sus víctimas, que son los héroes de la obra.

Contra lo que algunos de sus críticos piensan, es poco probable que La teta venga siendo premiada en el exterior por poner en vitrina las miserias de la barriada peruana, llaga social que compartimos con más de 100 países. Tampoco se trata de la conspiración de una internacional caviar que promueve confesiones tercermundistas.

El Oscar del año pasado a Slumdog Millionaire, la película hindú, muestra que los gigantescos universos marginales de la pobreza urbana han sido asimilados como tema por la globalización. Aunque también allá hubo quejas de cuidadores de la imagen, molestos porque se les estaba sacando los taparrabos al aire.

Además de su calidad cinematográfica, el argumento más fuerte para los ya numerosos premios de La teta en el exterior es su profunda cala en el tema de las vesanias contra la mujer. Se trata, entonces, de la universalidad del tratamiento. Sin duda la parte que nos toca es peruanísima. Nueve asesinadas en enero 2010, hasta donde se sabe.

Pero la cinta tiene cosas más positivas que decir sobre el país. Si bien ella no es la primera en percibir el fenómeno, el manejo que hace Claudia Llosa de cómo la chicha urbana intercambia valores traumáticos con la cultura rural andina está en el centro del proceso nacional de hoy. Hay algo de propuesta utópica en la salvación del personaje Fausta.

No es solo la violación de su madre embarazada de ella lo que lleva a cuestas la protagonista, sino por supuesto también el profundo desprecio (y autodesprecio) por la sociedad indígena de los sublevados de 1980-1992 y sus represores. Ambos bandos se tomaron libertades propias de los contextos de un racismo que niega la condición humana de la víctima.

La nominación de La teta es un momento de gran alegría para los peruanos. Pero es inevitable que sintamos un orgullo mezclado con algo de congoja, tanto si nos podemos ver en la pantalla como si no. El mal de Fausta no se cura con el olvido, sino precisamente con el ejercicio equilibrado de la memoria. Que es el arte de Claudia Llosa, ciertamente.