LOS GRANDES AGOREROS CONGUISTAS

Magnífico artículo donde Pedro Francke demuestra, con números y cifras, que todo cuanto la DBA pregona respecto a las calamidades que sobrevendrían al país si se paraliza la inversiòn minera, son puro cuento. En principio, es falso que si Conga no va, no solo cesarán de llegar nuevas inversiones, sino que todas las empresas que están operando en el país se retirarán, por falta de confianza y garantías.
La historia demuestra que jamás, en ningún país, ha sucedido eso. Al contrario, cuando un gobierno expulsa a una empresa por delinquir o negarse a pagar sus impuestos, las demás transnacionales, que trabajan cumpliendo con las leyes y respetando el ordenamiento jurídico del país anfitriòn, no hacen causa común con la empresa sancionada y los inversionistas continúan llegando porque lo que buscan ellos es un país donde haya más oportunidades de ganar dinero.

Así ocurrió con Velasco y la IPC, con Chávez y Evo. Ninguna empresa se fue, pues, nadie es tan tonto como para abandonar un país donde está lucrando a más no poder. Así pasará con Cristina y Argentina, REPSOL tendrá que allanarse tarde o temprano, pese a las bravatas iniciales del gobierno español que, en vez de solucionar los agudos problemas de su país, se busca un pleito con una naciòn soberana, en defensa de una transnacional corrupta y denunciada en varios países, como el Perú.