¡ Que tal comparación más estúpida ! Ya no hay dudas de que García está perdiendo la razón. Con ese extraño don que recibió de Dios para engañar y engatusar a la gente - tal como él se ufana y repite contínuamente- trata de deslizar la idea de que entregar una mina a una voraz transnacional, con una mìnima ganancia para el Estado, es "utilizar " este yacimiento. Pero lo más absurdo es decir que los minerales se van a morir o desaparecer en tres meses si no los explotamos, tal como sucede con los peces. ¿ Habrase escuchado una burrada más grotesca ?
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