En efecto, no se puede plantear un partido en base a un solo jugador, por más crack que este sea. En todo el primer tiempo el equipo peruano jugaba en torno a Vargas, esperando quizá alguna corrida como contra Argentina. Pero el rival también jugó a marcar estrictamente a ese jugador, por lo que Perú no logró ningún gol en esa etapa. Las cosas cambiaron al salir Vargas y vinieron los goles. Pudieron ser por lo menos 5, pero, como dice Moscoso, no estamos acostumbrados a ganar, y tenemos miedo de golear, pudiendo hacerlo.
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