LOS CUATRO JINETES DEL APOCALIPSIS CONTRA OLLANTA

La derecha peruana, la más vieja, corrupta e incapaz de Latinoamérica, aterrorizada y desesperada por el ascenso imparable de Ollanta, todavía cree, sin embargo, que el electorado peruano es un rebaño de borregos al que se puede asustar hasta con un zorro disecado. para llevarlo al matadero o al despeñadero. Por eso, sumisos y obedientes a la consigna de Alan García "INFLAR EL TEMOR A HUMALA", los 4 candidatos de la derecha y todos los medios de comunicación se han lanzado a una feroz y arrolladora campaña de demolición contra el candidato nacionalista. Es una guerra sucia total, de tierra arrasada y el todo vale. Pero cuyo efecto será contraproducente.

Hace poco, cuando Ollanta tenía apenas el 5%, sus competidores lo felicitaban por haber cambiado con respecto a su discurso de 2006. Hoy, que se ha encumbrado al primer lugar, lo acusan de ser el mismo autoritario, extremista, senderista, chavista, evista, que dará el salto al vacío y otros dicterios de la misma calaña. No son capaces siquiera de inventar nuevos cargos, sino que repiten exactamente lo mismo de hace 5 años.

Así, la derecha no aprende de las lecciones de la historia. Mientras más ataques, insultos y calumnias proliferen en este proceso, Ollanta subirá más y hasta puede tentar la victoria en primera vuelta, al paso que va. Lo que evitaría el inútil cargamontón derechista de la segunda vuelta y ahorraría al fisco millones de soles.

Resignados al seguro pase de Ollanta a la segunda vuelta, los 4 candidatos de la derecha se pelean entre ellos. Cada uno de ellos se autoproclama "salvador de la democracia" y el único capaz de derrotar a Ollanta en la segunda ronda.

Pero el debate será 4 contra Ollanta. Los Cuatro jinetes del apocalipsis tratarán de apabullar y arrinconar a Ollanta, con el argumento del supuesto doble discurso que enarbolaría, para lo cual mostrarán en todo momento el Plan de Gobierno de Gana Perú. Al día siguiente, como ya no se podrá publicar resultados de las encuestas, todos a una gritarán que Ollanta fue el gran perdedor y a partir del 10 de abril, presionarán a la ONPE para que demore el conteo uno o dos meses, tratando de cometer un fraude contra Ollanta, tal como lo intentaron y fracasaron con Susana Villarán. No somos adivinos, pero conocemos la historia polìtica de este país, especialmente a su clase política tradicional.

Compatriotas, guerra avisada no mata gente. Sigamos luchando desde nuestras trincheras y no descuidemos ningún frente.